| 𝐏𝐫ó𝐥𝐨𝐠𝐨. |

| Prólogo. | 

Era una noche pacífica, el viento soplaba las hojas de los árboles haciendo algunas de ellas caer, la luna estaba llena, grande y brillante, tanta tranquilidad hasta que un disparo interrumpió la paz.

—¿¡Pero estás loca, Anko!? —una pelimorada tenía los brazos de la mencionada arriba, evitando que otro disparo se le escapara.

—Si ustedes no lo hacen, ¡yo sí! —decía entre forcejeos.

—Gritando no cambiarán nada. —el llanto de unos bebés se empezó a escuchar—Lo ves.

—Es que a Kurenai es la única a la que se le pudo ocurrir esto. —dejó de forcejear y se quitó de encima a la pelimorada, guardando su arma—Traer a la casa a cinco escuincles.

—Son niñas.

—Lo que sea, me da igual. —se cruzó de brazos—¿Qué se supone que haremos con ellas?

Las cinco mujeres se miraron entre sí.

—No podemos dejarlas en la calle. —decía la pelinegra de ojos carmesí.

—¿Y el orfanato? —dio como opción la peliazul.

—Oh, no, claro que no. —negó la pelimorada—Yo vengo de ahí y les aseguro que les harán una vida imposible a las pobres.

—Bueno, entonces, ¿qué hacemos? —la Mitarashi estaba cansada de esto.

—Nos quedaremos con ellas… —una peliverde de mechas naranjas vio de reojo a la Mitarashi antes de seguir—sólo por hoy. Estamos muy cansadas, mañana nuestras mentes pensarán mejor.

Las mujeres asintieron con lo dicho, menos una.

—Sólo espero que no se encariñen con ellas.

La Mitarashi le dio una mirada de desprecio a las bebés.

 

.

Hinata, Sakura, Ino, Temari y Tenten son adoptadas por un grupo de mujeres criminales llamadas "Black Birds", siguiendo su legado después de la desaparición misteriosa de éstas.

.

 

.

 

.

 

.

 

Próximamente…